Agáchense que lleva….

La inundación de las bolsas de basura que antaño colgaban de unas canastillas, ahora lucen por todos lados, incluso colgando de clavos en las paredes, en los postes, o en algún carro abandonado, creando con ello no solo una mala imagen para una ciudad que busca ser “pueblo mágico”, sino contaminación y fauna nociva de la que ya proliferan cucarachas y ratas de cuatro patas… De las otras, es decir, de las ratas de “dos patas”, tenemos que reconocer que a pesar de la labor que desempeñan las autoridades ministeriales para investigar los casos que se han presentado de un tiempo para acá, estas lacras todavía siguen “dando la batalla”…

En fin parece ser que hay por ahí dos que tres personas que se consideran “importantes” y se han interesado en este tema, y es que para poder figurar públicamente tienen que recurrir a estas tretas, pues no les queda de otra… Que ya se preocuparon por hablar y solicitar que haga presencia en Jalpan el Procurador del Estado, pues les preocupan mucho los robos que se han cometido en los últimos días en esta cabecera… ¿Será que ni siquiera se han puesto a pensar que por andar apoyando todas las arbitrariedades e imposiciones que ha cometido el alcalde jalpense, ellos mismos están contribuyendo al aumento de la delincuencia?…

Por favor señores, en lugar de estar pensando en figurar públicamente con una preocupación que no es real, mejor pónganse a pensar en propuestas viables que abatan los índices delictivos… ¿acaso no se han dado cuenta, o no están enterados que algunos de los robos que se han cometido, apuntan a una cruda realidad como es la de tener que robar por hambre y que en su mayoría son menores los que participan en este ilícito?…

Ah, pero eso sí, se enojan y dicen que exigirán a las autoridades que hagan su parte, pero cuando se trata de denunciar cualquier ilícito, simple y llanamente no lo hacen, pues prefieren perder algún bien material, que perder el tiempo para hacer la denuncia debida, o simple y sencillamente porque lo que perdieron ni siquiera les pertenece, tal es el caso del robo que se dio en las instalaciones de la nueva radiodifusora, en donde se sabe, fueron robados tubos de cobre y las personas que están a cargo de tal obra ni siquiera se preocuparon por denunciar, claro pues a ellos no les cuesta, es nuestro dinero, los impuestos que tenemos que pagar y que se regresan para ser convertidos en obras de beneficio social…

Claro que actualmente solo se beneficia a unos cuantos, tal y como lo hizo saber en esta redacción uno de los vecinos del centro histórico, zona considerada por la UNESCO como patrimonio cultural de la humanidad, quien se pregunta de qué meritos gozan algunas familias que habitan en esta zona, para que se les estén otorgando las facilidades para cambiar fachadas a unos y a otros no, ¿En que estriba la diferencia?, ¿Es acaso en los apellidos o en las filiaciones políticas? ¿Alguien nos puede explicar cómo es que se está permitiendo esta situación, cuando se supone que las fachadas del centro histórico están catalogadas?…

Aunque en este sentido Jalpan no es el único, pues dejen les comento que en Landa se está dando una situación similar, y mientras que a una de las fachadas de una casa que está justo frente a la misión se le cambió el color a unos pasos hay una construcción que a pesar de tener los permisos respectivos del INAH y de estar cumpliendo con los lineamientos ¡no puede obtener el permiso municipal! ¿Cómo la ven? Y conste que quien nos comentó sobre este asunto dice que el edil Norberto Jiménez no tiene nada que ver en el asunto. No, es el director de obras públicas a quien desde hace mucho tiempo no le ha dado la gana autorizar el mencionado permiso…

Y es que hay que reconocer que a pesar de que el alcalde landense ha mostrado en muchas ocasiones la sensibilidad que desde siempre le ha caracterizado, está rodeado de algunos servidores públicos que en lugar de estar dirigiendo las áreas que les han encomendado, deberían mejor estar recibiendo un curso de relaciones humanas, a ver si así se les quita lo egocentristas, aterrizan y ponen los pies en el suelo, no sea que vayan a caer estrepitosamente y no tengan ni siquiera una mano que les ayude a levantarse… En fin el espacio se acaba pero si Dios lo permite nos leemos en la próxima y que pasen un bonito fin de semana.